INTRODUCCIÓN

En los últimos años, el rediseño del currículo en las carreras universitarias dirigido por el Consejo de Educación Superior en Ecuador, manifiesta una creciente preocupación por el estudio de diferentes aspectos de la comunicación interpersonal en el proceso de enseñanza-aprendizaje. En el contexto del régimen académico y en los talleres nacionales, se ha enfatizado en la necesidad de aportar a la integración de los lenguajes comunicativos, sobre todo, en función de la calidad de la formación del estudiante y la preparación para enfrentar los retos del milenio.¹

Consecuentemente, se precisa que la preparación en el dominio de la comunicación interpersonal (verbal, no verbal, escrita, digital) resulta una exigencia de primer orden en la formación del estudiante universitario de estos tiempos, para que este pueda enfrentarse a la dinámica multicultural y de apertura a la globalización del conocimiento, de la época actual.² Sin embargo, la identificación de las concepciones por parte de profesores y especialistas en formación, tanto en Ecuador como en otros países, reveló que aún es insuficiente la reflexión teórica respecto al tema.

En este sentido, se requiere de estrategias y alternativas, sustentadas científicamente y desde el propio contexto educativo, que se orienten a mejorar esa situación. En relación a lo anterior, el presente estudio propone un sistema de métodos que se justifica sobre la base del estudio de la teoría de sistema desde la concepción dialéctico-materialista, según lo cual se asumió que los sistemas se utilizan para designar una de las características de la organización del objeto, fenómeno y/o proceso de la realidad educativa, proponiendo el análisis, interpretación, síntesis y generalización que establece subordinación a los elementos que la conforman, ampliando la comprensión de este, como reflejo o representación del objeto de estudio en la realidad objetiva.

Avello y colaboradores³ reconocen al sistema como conjunto delimitado de componentes relacionados entre sí, que constituyen una formación íntegra; y que los sistemas pueden llegar a ser abiertos y cerrados: los abiertos predominan en el ámbito social, definidos por rasgos como la interconexión interna, que condiciona la interacción como elemento que rige el funcionamiento, ordenamiento y organización, permitiendo la jerarquización de sus componentes, al establecer los subsistemas y los elementos que lo forman; y por la adaptabilidad al contexto, que garantiza su integración y las condiciones que favorecen la producción del cambio.

En esta investigación se asumieron las concepciones de sistema que presenta De Armas y Valle,⁴ lo cual permitió confirmar la preferencia hacia este tipo de resultado científico para la solución del problema que se estudia. El valor teórico metodológico del sistema brinda la posibilidad de representar la relación entre el proceso de enseñanza-aprendizaje con la comunicación interpersonal, así como revelar las dinámicas internas en que se sustenta el aporte al perfeccionamiento del proceso de enseñanza-aprendizaje de los estudiantes en la carrera Licenciatura en Educación.⁵

El objetivo del presente trabajo es presentar un sistema de métodos para la comunicación interpersonal en el proceso de enseñanza- aprendizaje.

DESARROLLO

Fundamentos del sistema de métodos de enseñanza aprendizaje

El sistema propuesto posee como fundamento integrador, el enfoque histórico-cultural, pues la concepción dialéctica de la formación y las teorías relacionadas al desarrollo humano, la actividad y la comunicación, son sustentos y, además, referentes para la reflexión de las decisiones metodológicas en la práctica. Asimismo, se toma en cuenta el valor que tiene para el sistema, el conocimiento de las condiciones en que tiene lugar el proceso para lograr la formación integral de la personalidad del estudiante, concebido como objetivo de formación. Este propósito supone una comprensión del proceso, así como de la configuración diversa, compleja y contradictoria generada por la relación dialéctica entre individualidad, grupo, educación y sociedad, en los procesos de formación. Esta idea se justifica en el currículo y está regulada por la responsabilidad social que se le atribuye a la Educación Superior y que expresa el alcance cognitivo del diseño de las carreras. Esta no solo orienta la selección de contenidos del currículo, sino de los contextos y los actores que participan en el proceso de enseñanza- aprendizaje.

El cambio de concepción en la orientación de la formación, explica la incorporación en el proceso de enseñanza de los recursos psicológicos esenciales para asegurar el aprendizaje a lo largo de la vida, entre ellos: motivación, interés, memoria, pensamiento crítico, metacognición y orientación proyectiva de la vida personal en correspondencia con la vida social.⁶

Estos aspectos también deberán considerar la función del diagnóstico de los estudiantes, la percepción que tiene el estudiante de sí y de los demás, del propio proceso de comunicación interpersonal y de la enseñanza, sus motivaciones, desarrollo cognitivo y la disposición para aprender y comunicarse; pero es necesario identificar también los estilos de aprendizaje que tiene el estudiante.

En esta circunstancia, al menos dos referentes son importantes: el estilo de aprendizaje para gestionar la información (canales de aprendizaje): estilo visual, estilo verbal- auditivo; y el estilo de aprendizaje relacionado con las formas de orientarse hacia la comunicación y sus relaciones interpersonales en el aprendizaje: estilo cooperativo y estilo independiente o individual.⁷

De este modo, las prácticas pedagógicas y didácticas deben estar centradas en la práctica, la reflexión, la participación, la autogestión, el trabajo colaborativo y vivencial, por medio de los cuales las actividades de enseñanza-aprendizaje favorezcan la escucha, la reflexión y elaboración de conocimientos desde la relación interpersonal (pedagógica y didáctica).

Desde una visión amplia y compleja, se configura el sistema de métodos que intenta sistematizar la integración de los recursos psicológicos básicos para el aprendizaje. Se valora que la relación entre el proceso de enseñanza-aprendizaje y la comunicación interpersonal, es un factor a tomar en consideración en el diseño y desarrollo de la carrera Licenciatura en Educación. Esta posición supone que:

• El proceso de enseñanza-aprendizaje se convierta en un espacio para que el estudiante tenga oportunidad de expresar sus criterios y valoraciones sobre los temas curriculares y aquellos que investiga; deberá elaborar y socializar los resultados de las actividades que realiza, plantearse retos, identificar los avances de su trabajo y los desaciertos teóricos y empíricos de este, defender sus puntos de vista y desplegar las acciones comunicativas necesarias, para justificar su posición activa en la construcción del conocimiento científico técnico, en el área del saber en que se forma como profesional de la educación.
• La selección de los métodos que conforman el sistema, se sustenta en: carácter flexible para lograr nuevas configuraciones de orden epistémico, que alcanzan un valor heurístico y desarrollador, de manera que favorezca la independencia del estudiante y lo prepare para el emprendimiento.
• Las actividades de enseñanza-aprendizaje se orientan a utilizar y estimular el uso de estilos de aprendizaje visual y auditivo, esenciales para el desarrollo de relaciones interpersonales de carácter cooperativo, favorecedoras de la autonomía y creatividad dentro del grupo.
• Las formas organizativas de enseñanza-aprendizaje relacionadas, deben graduarse en función del aprendizaje de los aspectos básicos de la actividad pedagógica profesional. Deben centrarse en el análisis y solución de problemas profesionales, utilizando una secuencia metodológica en la cual se atiende a la estructuración lógica de los contenidos de las disciplinas.
• La utilización de las tecnologías de la información y la comunicación en el proceso de enseñanza-aprendizaje, se convierten en una exigencia de la sociedad contemporánea, pero estarán supeditadas al objetivo de la enseñanza y a las necesidades del aprendizaje.

Desde estos fundamentos generales, la estructuración de la actividad de enseñanza- aprendizaje orientada a la comunicación interpersonal, supone dos condiciones básicas:

Primero, como base para la toma de decisiones didácticas, se deberá priorizar el diagnóstico de los estilos de aprendizaje, motivaciones, habilidades comunicativas, la percepción y auto concepto que poseen los estudiantes acerca de sus relaciones interpersonales ya estructuradas; pues ello influye en la disposición para la comunicación interpersonal. Segundo, durante el diseño y desarrollo del proceso de enseñanza-aprendizaje, se deberá privilegiar una interacción cada vez más intencionada e integradora entre los participantes.^5,6

Para cumplir la primera condición se deberá ampliar el conocimiento de los profesores acerca del estilo de aprendizaje más utilizado por los estudiantes, así como explorar la situación psicosocial que puede favorecer o no su desempeño comunicativo durante el aprendizaje. Para la segunda condición se establece como constructo regulador del sistema, la relación entre los niveles de interacción comunicativa, en correspondencia con los métodos de enseñanza problémica que favorecen la comunicación en los diferentes momentos de la actividad de enseñanza-aprendizaje. (Tabla 1).

El profesor constituye un mediador fundamental, pero no es el único. En el proceso de aprendizaje del estudiante, los demás estudiantes también se convierten en importantes mediadores del proceso de interiorización y elaboración del saber, hasta llegar a convertirse en los principales sujetos de la exteriorización del saber; ya sea como público espectador, interlocutor o coprotagonista del resultado del aprendizaje.⁸ Desde esta perspectiva se estructura el sistema de métodos.

Estructura, relaciones y requisitos del sistema de métodos para la comunicación interpersonal en la carrera Licenciatura en Educación

De acuerdo con la posición que se adopta, al sistema de métodos para la comunicación interpersonal en el proceso de enseñanza-aprendizaje, se le otorgan las siguientes características:

• Integridad formativa. Está orientada a concretar en las actividades que se realicen la unidad de los aspectos cognitivos, afectivos, procedimentales, axiológicos y metacognitivos, asociados al saber que se estudia y a las relaciones interpersonales, como una exigencia en la labor del profesor, pues se valoriza la contribución de este conocimiento para su desempeño actual y prospectivo como profesional y ciudadano.
• Secuencial: A partir del objetivo se estructuran tres subsistemas que responden a los propósitos de cada momento de la actividad, en correspondencia con los niveles de asimilación del contenido, donde se incluyen métodos que propician ampliar de manera gradual los niveles de interacción entre los participantes. En la medida que el estudiante cumple las tareas de aprendizaje, se va desarrollando la comunicación interpersonal.

El sistema está compuesto por tres subsistemas que se relacionan con los objetivos de las actividades de enseñanza-aprendizaje y configuran determinadas exigencias respecto a la lógica de estos, para que el sistema de métodos, guíe el diseño y desarrollo de dichas actividades en las asignaturas de la carrera, con un enfoque contextual. (Figura 1).

El primer subsistema, denominado propedéutico, tiene el objetivo de familiarizar a los implicados y preparar las condiciones para que en el aprendizaje se estimulen las relaciones interpersonales. Por tanto, está orientado a desarrollar motivaciones, aprobar la autopercepción y percepción del grupo, identificar sus preferencias y determinar los objetivos que conducen a establecer la relación con uno o varios estudiantes, formar grupos en el aula, para el autoestudio o para la comunicación en redes.

Este subsistema está conformado por los métodos exposición problémica y búsqueda parcial, mediante los cuales es posible que el estudiante identifique y valore las potencialidades que ofrece la comunicación interpersonal en el aprendizaje, en la medida que crea las posibilidades para que los estudiantes puedan participar en este proceso de enseñanza-aprendizaje, a partir de la comunicación interpersonal que promueve. Implica que al utilizar estos métodos se pueda estimular la disposición hacia la comunicación interpersonal, en la medida que el estudiante reconozca la importancia de la relación comunicativa con otros en función del aprendizaje.

La aplicación de los métodos de este subsistema debe entrenar a los estudiantes en la observación crítica de su propia actividad, en la valoración y comprensión de los problemas que tienen para enfrentar las relaciones interpersonales influyentes en la situación presentada en el aprendizaje, así como aquellos aspectos que pueden superarse desde la apertura a la interacción comunicativa de tipo afectiva.

Es evidente que el profesor ocupa aquí un lugar esencial en la orientación y creación de situaciones psicológicas positivas, en las que se valorizan las experiencias personales y profesionales, y el estudiante puede compartir con los demás, con otros actores educativos y con el profesor, durante el proceso de enseñanza-aprendizaje que se desarrolla en las aulas. Esto constituye el rasgo distintivo de los métodos que se utilizan en el subsistema.⁵

El subsistema de desarrollo, está orientado a la apropiación del conocimiento, permite diversificar las interacciones comunicativas, e incluso, incorporar de manera ocasional a otros sujetos desde contextos diferentes de aprendizaje. Por su finalidad, se incluyen las relaciones entre los métodos anteriores y la incorporación de la investigación como método de enseñanza-aprendizaje, propio de la disciplina curricular en la carrera, otorgando una cualidad distintiva a la apropiación de los contenidos, pues es el momento en que la construcción individual se pone al servicio del grupo, propiciando una mayor amplitud a la comunicación interpersonal que se establece en el proceso.

Es preciso tomar en cuenta que la aplicación de estos métodos estructura las actividades del proceso de enseñanza-aprendizaje, y a la vez genera la situación comunicativa que servirá de marco para concebir la comunicación interpersonal entre los estudiantes, con el profesor y con otros profesionales, durante las actividades de práctica y las de vinculación con la sociedad.⁶

De acuerdo con lo anterior, en este subsistema se propiciará que los estudiantes se identifiquen y entrenen en la utilización de las vías, recursos y ayudas para comunicarse con las personas que participan en el proceso. El proceso de aprendizaje permitirá registrar experiencias comunicativas (positivas y negativas), compartir las vivencias y revelar las posibilidades personales, actualizar la percepción y autopercepción que se posee para comunicarse. Desde este subsistema se deberá compartir la oportunidad para incorporar la comunicación interpersonal como un factor esencial en la producción colectiva del conocimiento, en la cual se comparten las experiencias que al ser (re)significadas mediante el intercambio, podrán volver a aplicarse en la práctica.

El tercer subsistema, denominado valorativo, pretende generar la reflexión y evaluación de los resultados del proceso de enseñanza-aprendizaje y de la comunicación interpersonal desarrollada, por eso sitúa como método fundamental del sistema la exposición problémica, en tanto que, al sustentarse en un proceso de análisis y ejemplificación de los criterios valorativos de carácter individual y grupal, constituye la vía para identificar de manera crítica los avances, descubrimientos, aprendizajes consolidados y transferidos.

En este orden, la utilización de la conversación heurística como método del subsistema, permite aprovechar las experiencias del estudiante durante el proceso de enseñanza- aprendizaje, lo cual posibilita y crea oportunidades para que estos puedan participar en la demostración de los aprendizajes obtenidos.

En su procedimiento interno este subsistema incluye también los cambios de percepción y autopercepción de las posibilidades de los miembros del grupo para la comunicación interpersonal. No se descarta que el profesor incorpore a los criterios de análisis, la evaluación de las habilidades comunicativas generadas en las actividades de enseñanza-aprendizaje orientadas a favorecer la comunicación interpersonal. En particular, al favorecer la socialización de criterios, opiniones y valoraciones acerca del proceso y del resultado de este, los estudiantes pueden contrastar sus criterios con los del resto, argumentar su posición y enfrentar opiniones contrarias, todo lo cual los prepara para un exitoso ejercicio de comunicación interpersonal.^5,6

Por su naturaleza didáctica, el sistema de métodos para la comunicación interpersonal permite una adecuación flexible al contenido, pondera el uso de medios de diferente naturaleza, sobre todo, los recursos de aprendizaje en soporte digital y en la red. El sistema que se propone posibilita valorar los aportes que hacen los sujetos al proceso, a partir de las características de su personalidad, experiencia profesional, intereses y motivaciones, lo cual confirma la dimensión personalizada y de participación que estos tienen en el proceso de enseñanza-aprendizaje de la carrera: estudiantes y profesores alternan la función de protagonista y la comunicación frontal profesor-estudiante se combina con una distribución asimétrica y contextual.

En este sentido, la dinámica y funcionalidad del sistema se desarrolla en dos planos: en el plano externo, el sistema de método establece relaciones de inclusión con el proceso de enseñanza-aprendizaje que dinamiza la comunicación interpersonal, en la medida que facilita la apropiación del contenido abordado y facilita la ejercitación de la comunicación interpersonal de los estudiantes, favoreciendo su formación como licenciados en educación.

De esta forma el sistema de métodos orienta las influencias hacia la comunicación interpersonal en un enfoque cíclico que hace corresponder las fases del proceso de enseñanza-aprendizaje con las del proceso de comunicación interpersonal, identificando que los métodos son los que van creando una sinergia propia entre ambos procesos, asegurando así el logro de los objetivos propuestos.

Los métodos de exposición problémica y búsqueda parcial que configuran el sistema propedéutico, aseguran las condiciones previas, la identificación y motivación con la intencionalidad del proceso de enseñanza-aprendizaje, sin desvalorizar el contenido del aprendizaje; y son estas condiciones las que permiten pasar a la fase de ejecución mediante el método investigativo, desde el cual la situación comunicativa que se crea permitirá el tratamiento y apropiación de los contenidos y el ejercicio de la comunicación interpersonal.

El clima comunicativo creado en esta fase del proceso de enseñanza-aprendizaje, al utilizar el subsistema de desarrollo, es la base para que en la fase de control del proceso de enseñanza-aprendizaje se jerarquicen actividades orientadas a promover la valoración individual y grupal acerca de los aprendizajes logrados, socializados a partir de las posibilidades que ofrece el método de exposición problémica para la reflexión, la apertura de opciones críticas positivas o negativas y, sobre, todo la autovaloración.

En el plano interno, cuando se establecen las relaciones entre el método, los objetivos, contenidos, medios y evaluación, justificados en el sistema, se favorece la comunicación interpersonal, por su naturaleza interactiva y las posibilidades que ofrece al diseño de actividades grupales en el aula y en la red.

Las distintas formas de organización de las actividades de enseñanza-aprendizaje, (conferencia, seminarios, talleres, clases prácticas) se conciben desde las posibilidades que estas tienen para contribuir a la comunicación interpersonal, por lo cual no solo facilitan la apropiación de los contenidos de las diferentes disciplinas y asignaturas del currículo; sino que contribuyen a la formación en y para la comunicación interpersonal: la primera como parte de la apropiación de recursos propios de la comunicación, a partir de la experiencia, y la segunda, al considerar que estos saberes se utilizarán a lo largo de la vida.

Para cumplir esta función, la secuenciación de las formas de organización, según sus fines, responderá al clima de relaciones que se necesita concretar en los diferentes espacios y niveles formativos en que se desarrollan. En este sentido, se insiste en optimizar las actividades en grupos de trabajo, como una vía que promueve la participación de los estudiantes en su propia formación: desarrollar la motivación hacia la actividad, clarificar los problemas y responsabilidades, e identificar las necesidades y potencialidades para la comunicación interpersonal.

Estas actividades serán asumidas como contenidos de la enseñanza-aprendizaje, implícitas en la orientación hacia el aprendizaje, en los que se utilizan los recursos del contexto en que se desarrolla la actividad. Estas deberán concretarse en los espacios reales o simulados de la profesión.

Los medios, por su parte, responderán a la disponibilidad de recursos de aprendizaje de cada carrera, pero también se prevé la elaboración de estos por parte del profesor y la necesidad de que se involucre al personal especializado para optimizar los recursos informáticos y las tecnologías de las comunicaciones: videos, herramientas de correo, la plataforma MOODLE, fórum de discusión, entre otras opciones que ofrece la enseñanza y el aprendizaje en red.⁹

La connotación que se le atribuye a la evaluación, sobre todo, en el subsistema valorativo, exige delimitar su alcance, por lo que se sugiere utilizar como principal referente el producto de la actividad del estudiante y las evidencias de cómo logran comunicar los aprendizajes y revelar cómo los han construido desde la interacción comunicativa de carácter interpersonal.

No se obvia la posibilidad de utilizar técnicas de retroalimentación: cuestionarios, entrevistas, grupo de discusión, con los cuales no solo se pueden confirmar los niveles de comunicación interpersonal adquiridos; sino también las expectativas, intereses y proyectos a desarrollar a lo largo de los estudios, al connotar su contribución al desarrollo personal y profesional de todo licenciado en educación.

Se establecen, como criterios para evaluar la comunicación interpersonal (tanto el proceso como el producto) obtenidos en el proceso de enseñanza-aprendizaje de las asignaturas en la carrera Licenciatura en Educación, los siguientes:

• Situación social de aprendizaje como punto de partida para proyectar las influencias generadas por todos los cambios que conducen al desarrollo psíquico del estudiante en su realidad social.
• Vivencias en el proceso pedagógico del aprendizaje.
• Unidad cognitivo-afectiva, en las actividades que se realizan y que tienen un significado para el sujeto.
• Clima psicológico dentro del grupo para el intercambio y la construcción social del conocimiento y de nuevas vivencias al participar en procesos complejos que promueven el emprendimiento.

Criterios de evaluación de resultados

Para este análisis se deberán tener en cuenta los conocimientos y significados personales del aprendizaje, que han sido enriquecidos con la colaboración de los demás. Es importante incluir:

• Reconocimiento al proceso de comunicación interpersonal en el aprendizaje personal.
• Modo en que son utilizados los recursos comunicativos, lingüísticos y paralingüísticos, verbales, no verbales y digitales.
• Satisfacción con la experiencia.

Se propone establecer tres niveles para valorar los resultados obtenidos en la comunicación interpersonal, identificados en correspondencia con el cumplimento de los requisitos anteriores:

• Nivel bajo: el estudiante o grupo no logra establecer una comunicación interpersonal, acorde a las exigencias de las actividades de enseñanza-aprendizaje.
• Nivel medio: el estudiante reconoce los métodos generados por la comunicación interpersonal y se apropia de ellos, lo que ocurre cuando es capaz de reconocer que esta forma parte de su estrategia de aprendizaje, aun cuando no logra una expresión coherente y consolidada.
• Nivel alto: el estudiante puede aprovechar el proceso de enseñanza-aprendizaje como un espacio de comunicación interpersonal y desde este logra expresar y recrear el uso de los recursos lingüísticos y paralingüísticos, que lo distinguen de los demás.

El proceso de enseñanza-aprendizaje tiene concebida una comunicación propia que, de acuerdo al contenido, el momento del curso, las características de los profesores y los estudiantes, justifica la entrada al primer subsistema, en el cual se crean las condiciones para que los estudiantes, a partir de los métodos que se declaran, puedan ejercitarse en la autovaloración de las potencialidades y necesidades para aprender desde la comunicación interpersonal. Es aquí donde se consigue disponer al estudiante a este tipo de actividad dual (aprender contenidos y a comunicarse de manera interpersonal), lo cual explica que pueda entrar al segundo subsistema.

En el segundo subsistema las actividades de enseñanza-aprendizaje se organizan, atendiendo al carácter problematizador e investigativo, lo que supone que se intercambie y se socialice la información, ejercitando la comunicación interpersonal como un modo de aprender. Este subsistema, por tanto, es productivo en la medida que coloca al estudiante en diferentes situaciones de aprendizaje y comunicación, que le permiten apropiarse de un modo de relación y de aprendizaje, propios de la educación superior. Vale destacar el lugar que se le concederá a la confrontación y la argumentación de posiciones en los equipos de trabajo y en los grupos.

Desde los logros que aquí se van gestando y como parte del subsistema, se accede a la socialización de resultados del aprendizaje, pero se incluye la valoración y autovaloración de la contribución del ejercicio a la comunicación interpersonal, lo cual revelará los aportes que en materia de formación integral de la personalidad esta produce, dejando de manifiesto el desarrollo alcanzado en este sentido.

La aplicación de los métodos que conforman el sistema, contribuye a la comunicación interpersonal en la medida que la secuenciación presentada obedece a los niveles de asimilación del contenido y se asuma como parte de las actividades que debe realizar el profesor en el proceso de enseñanza-aprendizaje que organiza la carrera, con un enfoque didáctico. En este caso las actividades que desarrollarán los estudiantes se orientarán a:

• Autovaloración del desarrollo comunicativo y potencialidades del grupo para el aprendizaje, desde la comunicación interpersonal.
• Identificación de nuevos objetivos de interrelación, según las potencialidades para aprender.
• Formación de grupos en redes y en el aula.
• Búsqueda individual, discusión grupal y construcción colectiva del conocimiento.
• Confrontación y argumentación de los conocimientos elaborados, basado en vivencias, textos y materiales de diversos formatos.
• Socialización y exposición con apoyo de la ejemplificación.
• Valoración individual y colectiva de los resultados del aprendizaje, de las relaciones interpersonales logradas y de los aprendizajes comunicativos.

No obstante, se considera necesario precisar que la coherencia interna del sistema se define desde los fundamentos y estructura que sirven de marco a la comunicación interpersonal en el proceso de enseñanza-aprendizaje de la carrera Licenciatura en Educación. La base sistémica de la propuesta, se evidencia en el carácter totalizador e integrador del proceso, que no obvia las posibilidades de implicación y diferenciación que lo caracterizan.

La dinámica externa del sistema dependerá de los marcos de implementación, ya sea académica, práctica, investigativa o de vinculación; pero, en cualquier circunstancia, y dado el carácter de sistema, se considera oportuno dejar planteado que, para implementarlo en la práctica, se deben cumplir las siguientes exigencias, que constituyen una guía en una etapa más compleja de trabajo:

• La carrera debe asumir el sistema de métodos desde el proyecto curricular, e incluirlo en el modelo didáctico que promueve.
• Los profesores vinculados a la aplicación del sistema de métodos, deberán discutir y prepararse como facilitadores, comprometerse con la sistematicidad del proceso para comprobar su valor didáctico y determinar los factores que pueden dinamizar o ser obstáculos.
• Registrar las implicaciones del contexto, la experiencia de los sujetos, la complejidad de los contenidos y las formas de organización de la docencia, como criterios de análisis que podrán ampliar o concretar el sistema en y desde la práctica.
• Utilizar las oportunidades que ofrecen otros espacios y servicios de apoyo a los propósitos de la comunicación interpersonal, lo cual desde el punto de vista metodológico puede informar acerca de la experiencia y capacidad creadora que los estudiantes hayan adquirido en su accionar didáctico.
• Utilizar las interacciones comunicativas que tienen lugar en la actividad formal o informal, de carácter afectivo, cognitivo o axiológico, que se vinculan a estas como recursos de apoyo psicológico y que pueden influir de manera positiva en los resultados del aprendizaje, exigencia que se considera esencial para el desarrollo adecuado del grupo.

Por su nivel de generalización, la aplicación en la práctica del sistema de métodos para la comunicación interpersonal, exige compartir una experiencia más centrada en descubrir las relaciones entre el proceso de enseñanza-aprendizaje y la comunicación interpersonal, que en comprobar la efectividad de la propuesta. Para corroborar y clarificar la validez del sistema de métodos que se propone, los autores asumen la responsabilidad de sistematizar su práctica y la de sus compañeros, para otorgar mayor relevancia a los aspectos que desde ella se generan como alternativas en la implementación del sistema, ya que se precisa controlar la subjetividad de los análisis y eso solo es posible en la confrontación de los significados y sentidos que aportan la valoración de los expertos y destinatarios. Esta consideración se asume como un rigor metodológico en la investigación científica, y en particular de este tipo de resultado.

CONCLUSIONES

La situación que presenta el proceso de enseñanza-aprendizaje de la carrera Licenciatura en Educación, en la universidad de Guayaquil, donde se realizó el estudio, revela las insuficiencias para contribuir a la comunicación interpersonal. Aún predominan métodos de enseñanza-aprendizaje que privilegian la posición del profesor en la interacción comunicativa, lo cual afecta la interrelación estudiante-estudiante, estudiante-profesor, estudiante-grupo.

El sistema de métodos para la comunicación interpersonal en el proceso de enseñanza- aprendizaje, sugiere un cambio en el papel del profesor y en el modo en que se concibe y desarrolla dicho proceso. Por su naturaleza didáctica, explica la comunicación interpersonal como centro del proceso de enseñanza- aprendizaje. Se sustenta sobre la base de que las actividades que se orientan, ejecutan y evalúan, pueden favorecer la comunicación interpersonal, si los métodos seleccionados lo propician; así lo avalan la posibilidades que ofrece el método investigativo y de conversación heurística en las diferentes fases del proceso de enseñanza-aprendizaje, lo cual se logra al propiciar el diálogo, el intercambio cognitivo y afectivo entre todos los que participan, comparten, dialogan y aportan al aprendizaje de otros. Esta idea es básica para el ejercicio futuro de los estudiantes en la carrera de Educación.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS