La encefalomielitis aguda diseminada, también conocida como encefalitis post-infecciosa, es una enfermedad inflamatoria mediada inmunológicamente, de baja frecuencia, que compromete el sistema nervioso central. Se manifiesta por alteraciones neurológicas multifocales, rápidamente progresivas y de presentación habitualmente monofásica. Clínicamente, las manifestaciones son heterogéneas: cefalea, meningismo, diplopía, ataxia, déficit motor, síntomas y signos que pueden aparecer aislados o asociados. Se presentan imágenes de resonancia magnética nuclear encefálica realizadas a una paciente de 34 años, con manifestaciones psiquiátricas y movimientos involuntarios. Al examen neurológico se encontró hemiparesia derecha e hiperrreflexia muscular profunda. Los estudios imagenológicos, conjuntamente con los hallazgos del estudio inmunológico del líquido cefalorraquídeo, permitieron diagnosticar una encefalomielitis diseminada aguda. (Figuras 1, 2 y 3) Para su tratamiento se aplicaron esteroides por vía endovenosa, con buena respuesta clínica.