Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El psicólogo Héctor Burgos y su grupo de investigación demostraron que los fármacos clonazepam y ácido valproico, utilizados comúnmente para el tratamiento de la epilepsia y el trastorno bipolar, dificultan el aprendizaje y la memoria visuoespacial.
La investigación se llevó a cabo para profundizar en las consecuencias que estos medicamentos pueden tener sobre los procesos cognitivos, pues esos efectos secundarios han sido poco estudiados.
Por sus propiedades inhibitorias de la actividad cerebral, el clonazepam se prescribe habitualmente para tratar la ansiedad, la epilepsia o trastornos del pánico, y sus contraindicaciones solo se refieren a posibles efectos sobre la memoria. En el caso del ácido valproico, empleado en el tratamiento de la epilepsia y el trastorno bipolar, sus efectos adversos incluyen náuseas, vómitos y malestar gastrointestinal, pero no aluden a un posible deterioro cognitivo.
Se les administró a dieciocho roedores de laboratorio dosis de ambos medicamentos durante dieciocho días en una cantidad proporcional, según su peso, a las empleadas en humanos.
Al ser introducidas en el laberinto radial octogonal de Olton, dispositivo que permite obtener datos de desempeño en cuanto a memoria y aprendizaje, los animales tardaron más tiempo en realizar tareas, con un número de errores superior al grupo de control.
Los mecanismos neuronales de los roedores sobre los que actúan estos fármacos son muy similares en los mamíferos, por lo cual estos resultados son extrapolables al ser humano, según explica el psicólogo.
Los científicos investigan si este deterioro cognitivo es reversible, aunque los resultados preliminares indican que no lo es, ya que después de cesar la administración de los fármacos algunas ratas muestran dificultades en la memoria y el aprendizaje. No obstante, es necesario obtener mayores antecedentes a nivel electrofisiológico y bioquímico para extraer datos concluyentes.
Burgos espera finalizar este estudio en el primer trimestre del 2010. En tanto, la primera fase de la investigación fue premiada durante el Congreso de la Sociedad Chilena de Salud Mental que se realizó el pasado 31 de junio en Santiago por su contribución a la investigación básica en el área clínica.
La investigación llevada a cabo por Héctor Burgos y sus colegas Amparo Castillo, Christian Cofré, Jonathan Martínez y Alejandro Hernández, de las universidades de Santiago, Autónoma de Chile y Las Américas ha sido presentada en distintos foros nacionales e internacionales.


Fuente: Santiago de Chile, septiembre  10/2009 (EFE)