Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

La prevalencia de la hipertensión en la mujer menopáusica aumenta dos veces con respecto a otras etapas de la vida. Por esta razón, tal como se expuso durante la recién celebrada 8ª Reunión de la Sociedad Española de Hipertensión-Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SHE-LELHA), 01Ccuando una mujer durante la menopausia presenta, además, otros factores de riesgo como el tabaco, se incrementa de forma importante el riesgo de sufrir una complicación cardiovascular".



Según explicó la doctora Nieves Martell, especialista en Medicina Interna del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, 01Cen España, el 60 por ciento de las mujeres mayores de 70 años son hipertensas. Al llegar a la menopausia, en la mujer aparecen un conjunto de factores de riesgo cardiovascular. En este sentido, varios estudios apuntan el importante papel de los estrógenos en la producción de sustancias vasodilatadoras y en la inhibición de la producción de los radicales libres, como elemento regulador del sodio01D.



Tratamiento de la hipertensión en la menopausia

En opinión de expertos, el tratamiento en esta etapa debe plantearse teniéndose en cuenta los factores de riesgo cardiovascular de la paciente. Así, según indicó la doctora Carmen Suárez, especialista en Medicina Interna del Hospital La Princesa, de Madrid, 01Cno existe fármaco concreto indicado para el tratamiento de la hipertensión en la mujer postmenopáusica, ya que éste dependerá de los factores de riesgo asociados y de la afectación del órgano diana que la paciente presente01D.



Además, tal como apuntaron los especialistas en esta reunión, 01Cal margen del tratamiento farmacológico está demostrada la relación entre el grado de forma física y la tasa de mortalidad en las mujeres, de modo que aquéllas que llevan una vida sedentaria tienen cinco veces más riesgo de mortalidad cardiovascular01D.



En España se puede hablar de que aproximadamente seis millones de mujeres se encuentran en la etapa de la menopausia, y que dado que la expectativa de vida en la mujer en nuestro país es de 85 años, se estima que las mujeres viven cerca de 25 años o más en el período posmenopáusico.